Ushuaia

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Al día siguiente me cogí 2 autobuses por un total de 36 horas de viaje. Las 20 primeras horas no fueron duras y prácticamente me las dormí enteras, sin exagerar pude dormir unas 15 horas.

El segundo autobús que era mas al sur desde Puerto Gallegos a Ushuaia, eran unas 12 horas pero fueron las mas pesadas ya que cruzamos varias veces las fronteras con Chile así que es Argentina, luego Chile y así como 4 veces y en todas tienes que salir, sacar tu maleta, te sellan el pasaporte y comprueban que no tienes comida.

Cuando crees que todo se ha acabado el autobús se mete en un barco para cruzar un canal, al menos vi delfines negros y blancos que parecían orcas pequeñas que nos perseguían y saltaban al lado de las ventanas.

Cuando llegue a Ushuaia ahí ya hacia más frío, me encontraba en la última punta de Sudamérica, a solo 1000 Km. de la Antártida.

Toda esta zona se conoce como Tierra de Fuego, porque cuando la primera expedición inglesa que llego a esta zona, lo único que vieron fue hogueras por toda la costa. Debido a todas las supersticiones de los monstruos que había en el fin del mundo, pensaron que estaban en el mismo infierno por ver a la gente desnuda en el fuego y no se atrevieron a bajar siguieron de largo.

Los aborígenes que Vivian entonces ahí se cubrían de grasa de león marino e iban casi son ropa, por eso siempre tenían el fuego cerca, en las costas, casas e incluso en los barcos cuando iban a pescar.

Me quedaba 5 días en este parque nacional con un puerto, rodeada de enormes montañas que empequeñecen este pueblo. Mi objetivo principal era descansar, y lo conseguí, sin perder la oportunidad de ver los maravillosos paisajes que te encuentras en esta parte del mundo.

El primer día me fui en barco a la isla de los pingüinos, donde tuve la oportunidad de ver una colonia de pingüinos, sus nidos, crías, como se alimentan y relacionan y todo a menos de un palmo de distancia.

Otro día me fui en barco a ver las islas de alrededor, en cada isla que parábamos había algo diferente: la isla de los pájaros, la isla de los lobos marinos, elefantes marinos y el faro de Finisterre, que es una replica pero es el faro anunciando el fin del mundo.

En Ushuaia no comienza a anochecer hasta las 11.30 de la noche y amanece a las 4.30 aproximadamente así que solo tienes 5 horas de plena noche, así que fue impresionante ver la ciudad anocheciendo a la vuelta del crucero.

Otro día me fui de excursión con un grupo de israelitas a ver la laguna esmeralda. Caminamos durante 3 horas de ida y 3 horas de vuelta por unos preciosos paisajes, hacia frío y había barro por todas partes pero mereció la pena. Y que me iba inventando a los pobres israelitas todo lo que me pedían que les tradujera, como “Alvaroooooo donde estas que no te encuentro!!” significaba “tener cuidado con el toro que anda suelto!!” Y cosas así que se me iban ocurriendo, así se me quedaban mirando con una cara de sorprendido mientras yo seguía caminando sin inmutarme…
El resto del tiempo lo pase en el hostal, paseando por el hostal escribiendo en el blog y conociendo a gente, como las 2 locas newyorkinas, la pareja de israelitas, Silvia de Italia, Lai Fan de UK, que luego aparecerán en el blog además de las recepcionistas que eran súper majas.

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