Advertisement
Published: July 20th 2008
Los primeros días de este viaje lo pasamos en
Hellevoetsluis, un hermoso pueblito situado a una hora de auto de Rotterdam.
La historia de Hellevoetsluis estuvo siempre ligada al agua. Debido a su posición estratégica, en la costa del Mar del Norte, fue el puerto principal de la flota de guerra holandesa desde el siglo 17. Con el paso del tiempo se fue fortificando hasta convertirse en el pueblo con puerto mas fortificado de Europa. Los capitanes mas famosos de la flota holandesa la utilizaron como su base.
Durante el siglo pasado el canal que atravesaba Voorne permitió que Hellevoetsluis fuese un antepuerto de Rotterdam. En ese período el pueblo creció y tuvo una próspera industria naval. Lamentablemente la primer mitad del siglo 20 fue desastrosa para el pueblo. La marina cambió de puerto, la economía decayó y, como si fuera poco, los alemanes destruyeron 3/4 partes de los edificios durante 1944.
Pero como todo Europa, la ciudad se reconstruyó después de la guerra, tratando de mantener su arquitectura original. Nos encontramos con un puerto hermoso, rodeado de barcitos, un molino de 1836, muchos veleros y casitas pintadas de varios colores. En el pueblo, el mejor restaurant de
todo el viaje:
De Heeren van Hellevoet. Quien pase cerca de Rotterdam, no puede dejar de pasar a tomarse una cerveza por allí!
Estuvimos alojados en el resort
Citta Romana, un hermoso complejo de casas construidas alrededor de un pequeño lago. Cuenta con un restaurant, un mercadito y un pub. Se puede llegar a la playa caminando 5 minutos, a través de dunas llenas de vegetación. A los chicos les gustaba mucho ir a la playa, aunque preferían no caminar! Lo que mas les gustaba era ir a ver a los patos del lago y tirarle piedritas y jugar carreras alrededor de una rotonda.
El que mas disfrutó del mar fue Santino, que apenas vio el agua, se zambulló como un pez. No lo podíamos sacar! (aunque la verdad, que con el paisaje que se veía, nosotros tampoco nos queríamos ir de la playa).
Las tardes caminando por el pueblo, mirando barcos, van a ser inolvidables. Como se extraña estar arriba de un velero!
El jueves 3 finalmente partimos hacia Rotterdam para alquilar un auto y comenzar nuestro recorrido.
Advertisement
Tot: 0.099s; Tpl: 0.011s; cc: 10; qc: 25; dbt: 0.0646s; 1; m:domysql w:travelblog (10.17.0.13); sld: 1;
; mem: 1.1mb
