Favelas

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Esa noche fuimos a una discoteca que le habían anunciado daban Caipiriñas antes de las 12, y obviamente llegamos tarde. Así que no fue de lo más divertido para lo que estaba esperando de una noche en Copacabana.

Al día siguiente fuimos a la playa de Ipanema que estaba a 2 calles de la calle privada de hostales en el que nos quedábamos. La playa esta dividida en números y cada numero es una zona, la zona joven, la zona mas familiar, la zona gay, la hispana,… y el paseo va la gente patinando, footing, bicicleta y todo el mundo con un cuerpazo de flipar.

Esa noche nos fuimos con los del hostal de delante que eran Colombianos de marcha y ya si que nos lo pasamos genial.

A la mañana siguiente tuvimos la suerte de irnos a ver las favelas. Las favelas son pueblecitos que han ido construyendo en distintas partes de Río, los trabajadores que venían de las afueras y no tenían para pagar un alquiler, así que lo que comenzaron a hacer fue construirse sus propias casas, y pinchando los torres de electricidad y las tuberías de agua iban teniendo suministros, de una manera mas barata.

En la actualidad se quiere terminar no con las favelas sino con la corrupción y tráfico de drogas que hay. Se quiere finalizar antes de las Olimpiadas, y levantando unas torretas con soldados y metralletas. Es decir una guerra civil, en esta ciudad, ya que el terror esta en las balas perdidas que pueden recibir cualquier ciudadano brasileño o turista del mundo.

Entrar dentro por las escaleras y esas calles estrechas, es sorprendente, ver la cantidad de gente que puede vivir en tan poco espacio. No te dejaban hacer fotos en distintas zonas, donde evidentemente venden las drogas. Todo Río sabe perfectamente donde las venden.

Hay distintos niveles de favelas, y hay algunas que son como pueblecitos que no me importaría vivir en ellas con su encanto particular, hay muchas otras que ni bajamos del coche, ya que son impresionantes laberintos que huele a miedo y a peligrosidad.

Nos quedaba muy poco para pasar la Navidad, con ese calor en la playa, con esas vistas, tanto de los paisajes como de la gente que nos rodeaba, sin duda las navidades mas atípicas que he vivido hasta ahora.

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