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Published: August 12th 2007
Por fin hemos encontrado la magia de Australia, con un Outback desertico, inmenso, rojo rojisimo, con canguros, camellos, emus, y sobre todo la nada, a lo largo de kilometros y kilometros de carretera, hasta que nos hemos encontrado con el Uluru, un imponente pedrusco, simbolo sagrado de los aborigenes, que, vaya tela con los aborigenes.
Esperabamos que Adelaide fuese una ciudad muerta, pero nos sorprende agradablemente ver el ambientillo en el centro un sabado por la noche. El Youth Hostel, aunque frio e insipido por fuera, es un montaje espectacular en su interior con una inmensa zona comun donde no falta de nada.
Alli coincidimos con Juan, un canario que nos contesta en español a un sorry nuestro (se nos vera el plumero en nuestro acentillo?), pero que, tras identificarse, resulta sorprendentemente evasivo. Suelta un "soy de España" y se larga, en un contexto de encuentro en el salon de un albergue donde no hay nadie mas alrededor en ese momento. Luego volvemos a coincidir con el y nos acaba contando que acaba de llegar desde Canarias, ayer mismo, directo a Adelaide. Por lo visto, hace un tiempo vivio y trabajo por aqui, aprovechando su profesion de carpintero e
Ciudad subterranea
Capital mundial del opalohizo dinero en la construccion en el Outback.
Dice con gesto timido, creereis que estoy loco pero he vuelto a Adelaide a buscar a "una persona" con quien no me intercambie la direccion. Y asi esta desde que llego ayer, buscandola por la ciudad, y nos confiesa que tiene ampollas en los pies. Como la encuentre y le de calabazas, harto probable, esperemos que tenga motivos adicionales para haberse metido 15000 km en el cuerpo asi sin anestesia.
Nos esperan 850 km desde Adelaide hasta llegar a Coober Peddy, que parece el fin del mundo, aunque con esto no habremos hecho ni una cuarta parte de nuestro periplo de costa a costa. Empezamos a ver carteles desoladores de "a 350 km restaurante"...
Nos familiarizamos con los protagonistas del Outback, los Road Trains, unos camiones largos como un tren, que pueden medir hasta 50 metros, y van a bastante cañita. Asi que para adelantarlos, a mi me sudan las manos, me aferro al volante con panico y me concentro en las palabras de motivacion de Javi segun lo voy adelantando: venga, asi, asi, sigue, sigue, ya te queda poco, lo estas haciendo muy bien, el ultimo empujon y
Amanecer aborigen
A ver si tenteras Leyre ya esta..." Uff, que malos ratos, y eso que aqui las carreteras son tan rectas que hemos visto algun tramo que se utiliza como pista de aterrizaje, con las pertinentes lineas blancas pintadas en el suelo.
Coober Peddy es la ciudad subterranea, en la que toda la vida se hace bajo tierra, especialmente en los meses de verano, en los que la temperatura llega a los 50 grados. Menos mal que estamos entrando en el invierno, porque ya tenemos suficiente desolacion con las calles desiertas y polvorientas, y el deambular de unos tipos barbudos y tripones, con pinta de haberselo contado ya todo los unos a los otros.
Lo que nos hemos encontrado son en su mayoria griegos, que vinieron aqui hace años a trabajar en las minas de opalo, que siguen siendo el motor de la zona. Por lo visto aqui hay muchas historias de fortunas ganadas y perdidas, chantajes y mafias sospechosas. En cualquier caso, vida dura, trabajo duro, y aqui hay poco australiano, que en su mayoria ha preferido buscar suerte en la mas placida costa.
Y mientras tanto, hasta el garito mas cutre te prepara una ensalada griega. Y aqui todo el mundo
La roca
Anochecer para Andres habla
ingles con acento que a nosotros nos parece spanish, y con la fisionomia de estos tipos, uno creeria estar en un pueblo perdido del Mediterraneo. Luego nos enteraremos de que no es el unico lugar de Australia con comunidad griega, y que Melbourne es la segunda ciudad del mundo con mayor poblacion griega despues de Atenas.
Y para contrastar tanto sabor mediterraneo, distinguimos tambien una nueva especie, unos aborigenes cavernicolas de mirada perdida, melena rasta y cuerpo encorvado. Nunca ninguna raza o tipologia humana nos habia causado este impacto, estos tipos imponen, y, entre otras cosas, necesitan un peluquero. Glups, que miedo nos empieza a entrar...
Veniamos a Coober Peddy con idea de hacer una excursion muy especial. Se trata de acompañar al cartero que hace el reparto en los "pueblos" (a dos casas por pueblo) de la zona dos veces por semana en un recorrido de 600 km por pistas en el desierto con un paisaje lunar. Debe de ser una excursion muy especial y por tanto con un cupo limitado, ya que nos resulta imposible hacerlo cuando pretendemos. Hay otras 16 personas esperando antes de nosotros. Una pena.
La iglesia de Coober Peddy ("Quiberpidi"
Breakaways
Rodaje de Priscilla para los autoctonos) tambien es subterranea, y el cura anda como el cartero, recorriendo la zona, y por eso hay un cartel en la parroquia de "I am in the bush", o sea que este domingo no hay servicio. Por lo visto, se hace miles de kilometros el cura, y como le da miedo volar, siempre por carretera. Eso es compromiso y dedicacion.
En nuestro hostal-camping subterraneo, conocemos a Elise, una francesa de Normandia que esta viajando un anho por Australia en un viejo Corollita amarillo. Con ella iremos a ver amanecer en la luna de camino a Oodnadatta, de hecho ese es parte del camino que hace nuestro huidizo cartero. Espectacular. Y por algo este ha sido el escenario de peliculas como Mad Max u otras de despues del apocalipsis o en planetas hostiles.
Tenemos la sensacion de que por fin vemos algo absolutamente impresionante en este pais, un paisaje lunar, con alguna montanha (The castle) que cambia de color con la luz del sol. Recorremos The Breakaways y el Dog Fence, que es una valla de 5300 km que separa el ganado de unos traicioneros dingos, el perro salvaje nativo. Como es por la mañana, tenemos
Vuelta a la general
Cuidado con dormirse mas suerte en el avistamiento de canguros, ya que segun dicen, les gusta pasearse entre ocho y nueve y media de la manhana. Los vemos mirarnos curiosos, antes de desaparacer a brincos por la rojiza inmensidad.
In the middle of nowhere, acompanhamos a Elise a un pseudotaller mecanico, que su coche se ha rebelado en Marla, y seguimos otros 700 km hasta nuestro destino, el corazon rojo de Australia, el sagrado Uluru.
Dicen que es el pedrusco mas grande del mundo, pero realmente en la costa oeste de Australia por lo visto hay otro dos veces y medio su tamanho. El monolito se formo hace 600 millones de anhos, tiene 3,6 km de largo, una base de 9 km y mide 148 metros. En cualquier caso impone encontrarse esa roca rojiza en mitad de la nada, con colores que cambian a lo largo del dia con la luz del sol. El Uluru esta lleno de historias, de leyendas y de rituales, aunque son historias muchas veces muy simples, maniqueas, en las que no encontramos una magia especial.
El parque Uluru-Kata Tjuta es Patrimonio Natural y Cultural de la Humanidad, y sus propietarios tradicionales se llaman a si
Valle de la luna
Rodaje de Mad Max mismos Anangu. Tras el amanecer, haremos el trek alrededor de la piedra, que es bastante light la verdad, pero que nos permite conocer de cerca las espectaculares formaciones del monolito. Nos portamos bieeeen, Alvaro, y no pintamos en las paredes. No lo subimos porque los aborigenes te piden que no lo hagas, ya que es algo sagrado para ellos, y llaman mingers (hormigas en su lengua) a los que lo suben.
En cualquier caso, nos sorprende ver un monton de gente subiendolo, en un camino que parece mas de Sunday people que otra cosa. Y eso que la escalada es peligrosa, y en ella han muerto 35 personas segun cuentan. Aqui hay camisetas que rezan "yo subi el Uluru" y otras que dicen "yo no subi el Uluru"...
En el secret and sacred, algunos sitios del Uluru solo pueden ir hombres, otros solo mujeres o ancianos. Nos llama la atencion un sitio sagrado para mujeres cuyo nombre en aborigen es "mala puta" (?)
Los que se pasan por el forro los secret and sacred de los aborigenes son los propios australianos, en los que encontramos una furia similar de la que hemos vivivo en Bolivia con los
indigenas o en NZ con los mahories.
Preparaos para el rollo historico politico del jefe y el que no quiera que se lo salte. En el anho 1985 el gobierno australiano devolvio las tierras del parque nacional Uluru-Kata Tjuta a los tradicionales poseedores de estas, las tribus Yankunytjatjara y Pitjantjatjara, despues de arduas negociaciones y estos a su vez se las vuelven a arrendar al gobierno durante 99 anhos para que juntos gestionen el parque y por supuesto les pague un alquiler.
Estos tipos que mantienen una cultura basada en secretos (que solo pueden conocer los iniciados) y sitios sagrados para ceremonias, creen que la roca y el resto del parque fueron colocados alli por los ancestros creadores y que la contemplacion de la tierra sagada les ofrece todas las respuestas, para vivir de acuerdo con la tradicion, aunque eso suponga utilizar la tecnica ancestral del quemado de tierra (en una zona tan arida como esta) para que esta gente este a gusto.
La gestion compartida hace que haya multas de hasta 5000 Aus$ por tomar fotos de determinadas partes del la roca. Pero eso si, no por intentar clavarte 2000 Aus$ por una tela artistica naif
El castillo
No se porque pero es bueno para rodar algo puntillista cuyo motivo repiten sin pudor porque cuenta escenas de la vida tradicional.
Y el resto de los australianos estan quemados en definitiva porque se estan gastando una pasta inmensa en los aborigenes, que quieren preservar una cultura, que muchos entienden que no es muy distinta a las de nuestros tatarabuelos en la era pretelevision.
Por otra parte, los aborigenes estan sacando a relucir los problemas de la Stolen Generation, generada tras una iniciativa de los años cincuenta en que se cogio a niños aborigenes, se les quito de sus familias, para intentar integrarles en el mundo de “los blancos”. Hoy esa generacion tiene 50 anhos, la mayoria se encuentra perdida en un mundo al que no se ha adaptado y reclama sus raices.
De estas sensaciones que hemos tenido con los aborigenes, y que hemos vivido tambien en Bolivia con los indigenas y en NZ con los mahories, nuestra principal reflexion es que es complicado que los unos entiendan a los otros mientras no se conozcan, no se mezclen, y no compartan vida social, laboral o de cualquier tipo, que no lo hacen. Y eso refuerza la falta de entendimiento y el rechazo de los unos
En mitad de la nada
Buena companhia para cambiar de paisaje contra los otros. Un tema muy complicado con dificil solucion.
Sea lo que sea, no es de extrañar que alguien haya pensado que el Uluru, aquel bicho enorme en mitad del desierto tenga que tener algo de sagrado, sobre todo cuando se cree que dos tercios de la roca estan enterrados bajo tierra. Asi que Caty y Man, nos pedisteis foto del Uluru, y lo complicado ha sido elegir una entre las 300 que hemos hecho, desde un angulo, desde otro, con un color, de manhana, de tarde... Casi ha sido mas facil pillar al canguro, que tambien os obsequiamos segun peticion. Andres, hemos visto las estrellas de la mejor manera que se pueden ver en Uluru, y Victor, lo de pintar la bandera del Athletic y cantar la internacional quedaba mu mu feo y ademas lo prohiben los aborigenes, asi que nos contuvimos.
La puesta de sol nos impresiona mas que el amanecer, quizas spoiled por un grupo de 50 asiaticos que plantan sus sillas de camping delante de nosotros, y eso que creiamos haber encontrado un spot tranquilo. Pero como se puede comer sushi a las 6 de la manhana? Vienen en un tour organizado, que
Mas breakaways
Cambian de color con el sol como los girasoles de direccion les ha obsequiado con una mochila color Uluru que los 50 se calzan a la espalda. El individual thinking y el espiritu rebelde se debio de quedar dentro de un rollito de alga...
Y de alga a las Olgas o Kata Tjuta, su nombre aborigen, otra parte del parque con 36 domos, alguno mas alto que el propio Uluru. Son unas rocas con formas diversas tambien de un rojizo espectacular, que han dado pie para el trek del Valley of the Winds, un pateo un poco menos masificado, donde hemos avistado flue parrots, un animal que nos persigue todo el viaje. Y es que Leire y Elise no callan.
Descansamos de los treks en la piscina del Pioneer con unas cerves, para las que nos obligan que les demostremos que estamos alojados alli, porque la ley seca de esta zona no permite vender alcohol. Y es que los aborigenes deben de hacer algunos excesos por lo visto en la zona.
Por la noche, vivimos la experiencia del Sound of Silence, una cena bajo las estrellas que nos recomienda Rob. La cena es en un paraje espectacular con la vista del Uluru a un lado y de las
Y este bicho?
No hemos sido capaces de enterarnos como se llama Olgas en el otro. Alli disfrutamos con una puesta de sol en un cielo despejado, que nos deja esta vez un difuminado de azules y morados encima de la roca.
Y ya en plena noche, un astronomo nos enseñara todas las constelaciones, la cruz del sur (nuestra osa mayor) y nos contara historias de mitologia sobre el cielo y sus astros, a los que Javi se acerca con un telescopio a Saturno y a la luna.
Cenamos cerca de un fuego y con la companhia de tres matrimonios aussies en sus 50-60 años. Dos de los hombres son de descendencia italiana-siciliana, vinieron a Australia en busca de una vida mejor con sus familias cuando eran jovenes, y tienen un curioso acento extranjero cuando hablan ingles, idioma en el que mas comodos se sienten hoy.
Nick, el siciliano es un hombre sencillo, humilde, entranhable, emocionado y agradecido con cada experiencia y cada momento especial como este, que comparte con su mujer Betty (que sera prima de la de la tele...), que solo se queja de que hace frio. El intercala sus bromas y comentarios de un agudo sentido del humor, con expresiones llenas de sentimiento y ojos vidriosos
El mejor de los tres
Pateo en King s Canyon de: que bonito es esto, verdad?
Rick y Judy son de Sydney, tienen a su hija en España haciendo el camino de Santiago y a su hijo en India, volviendo de su trabajo de invierno en una estacion de esqui en Austria. Rick tiene una conha manhanera, ella es super atenta, y ambos tienen una enorme complicidad (y por tener tienen un camaron con 200 de zoom, nos morimos de envidia de la no sana).
Y el tercer matrimonio, mas reservado pero con una mirada limpia y con sensacion de estar realmente disfrutado tambien del momento, son de Tasmania. Rick le pregunta a el que como en un momento tan especial se pide un zumo de naranja en la comida y no el vino que todos tomabamos, y es que acaba de salir de una dura quimio hace dos meses y no sabe cuanto tiempo le queda de vida. Que edad tienes? 59 anhos, 8 meses y 14 dias le contesta. Hoy, 29 de mayo, al caer la noche en el corazon del desierto de Australia, yo me perdi el telescopio, pero he visto las estrellas un poquito mas cerca.
King s Canyon, en el Watarrka National
Camino a la Dog Fence
Paque los dingos no se coman el ganado Park, es otro de los highlights del corazon rojo, y nos lleva a hacer el que sera el mas bonito de los pateos, al borde del cañon, con la inmensidad del desierto como fondo. En el pateo, nos encontramos con la Ciudad Perdida y con el Jardin del Eden, un pequenho oasis en el desierto, con una apariencia de bosque humedo, que dicen que prueba que esta zona de Australia tuvo en otros tiempos un clima mucho mas tropical. Noche de charleta y tortilla de patata en nuestro camping, hacemos lo que podemos con los pocos ingredientes que traen hasta aqui los Road Trains.
Y de camino a Alice Springs, pasamos por la Mereenie Loop Road, una pista donde solo nos cruzamos con unos pocos todoterrenos, y es que el caminito se ls trae para nuestros dos Toyotitas. Lo sufrimos y lo disfrutamos, sobre todo al toparnos con cuatro burros perdidos en mitad de la nada y dos camellos, que huyen de Javi cuando les persigue para la foto. Y la foto buena era de los tres corriendo, pero no pudo ser.
Llegamos a la poblacion de Hermannsburg, uno de los pocos territorios aborigenes donde se permite entrar
Canguro
El primero mio que no de Leyre sin problema y sin permiso al hombre blanco. La escena es surrealista, parece que hemos vuelto atras unas cuantas eras mas que siglos, si no fuera por los coches destartalados que conducen y abandonan. Y es que una pareja majetona brit que conocimos en Sydney nos contaba que el centro rojo era un buen sitio para revender los coches, ya que el gobierno les subvenciona la compra de coches, con lo cual no les cuesta nada comprar coches viejos, que utilizan hasta que se acaba el deposito de gasolina (!), o me imagino que hasta que les deja de arrancar por algun motivo, y luego lo abandonan en la carretera. Cuando nos lo contaron, nos parecio ridiculo, pero con lo que hemos visto estos dias, y con el cementerio de coches abandonados que vemos en el arcen de Larapinta Road que nos lleva a Alice Springs, comprobamos que no se inventaban mucho. Surrealista.
En Owen Springs nos despedimos de Elise, que va a explorar los MacDonnald Rangers, otra zona interesante de gargantas y buenos pateos, a la que decidimos renunciar para seguir nuestro viaje. Todo no puede ser. Elise hace nuestro mismo recorrido, pero tiene un anho para conocer
Volaaamos
Saca la foto que me da vertigo Australia, asi que vamos a ritmos distintos. Bonne chance and keep up!
Y llegamos a Alice Springs, despues del vuelo raso de varias especies de pajaros de la zona, y de observar de costadillo al piton y a sus primos, a traves de un cristal, linterna en mano. Esperabamos que Alice Springs fuese un Coober Peddy en grande tambien surrealista, pero es una ciudad relativamente dinamica, con mezcla de gente y una minima vidilla en la calle. Y el mundo sigue siendo pequenho, y a pesar de estar a 440 km de Uluru, ups!, pero a quien saluda Javi tan efusivamente? En mitad de la calle, nos encontramos a Nick y a Betty, los ex sicilianos, y Betty, como no, tiene frio.
Y ya nos queda poquito para llegar al centro centrisimo de Australia, en nuestro camino hacia Darwin, con Tennant Creek como siguiente destino. Nada mas salir de Alice Springs, cruzamos el Tropico de Capricornio, y pasamos por Ti Tree Roadhouse, que es el pub mas... centrico de Australia, ya que esta a tan solo 25 km de Central Mount Stuart, el centro de gravedad matematico del pais.
Y curiosamente sera en el mismisimo corazon
Sorpresa
En King s Canyon de Australia cuando paramos para la pertinente foto, donde tendremos el que sera de momento el unico contacto real con los aborigenes. Comprobaremos que no todos se desprenden del coche cuando se quedan sin gasolina, algunos intentan empujar el coche, sueltan gritos cavernicolas a la parienta y cuando ya no saben que hacer, se acercan a dos spanish pringados con un bidon y una goma para ver si puede chupar del tema.
Nos miramos, y decidimos que a pesar de la hostilidad que hemos sentido en todo momento de los aborigenes hacia el exterior, les vamos a dar el beneficio de la duda, y venga, anda, mete la gomita y chupa. Incluso Javi le da al aborigen unas lecciones de fisica de vasos comunicantes de como tiene que ponerse para que salga la gasofa, y agachate, y vuelvete a agachar, pero nuestro coche esta protegido con una red, como nuestro amigo tizon constata al minuto uno. Parece que no es la primera vez que hace esto de mendigar gasolina en mitad de la carretera. Nos da rabia porque no es una situacion que le puede pasar a cualquiera de quedarse sin gasolina, es que saben que va a pasar
Cotilla
El famoso emu, que te acerca el pico para curiosear y les da igual.
En fin, el caso es que nos pide sin favor que vayamos a la gasolinera mas cercana, a 20 km, accedemos, a ver si con el buen rollito conseguimos acercarnos a un aborigen y descubrir su cara amiga, y nos dice que el no se monta, que no deja solos a la parienta y al ninho, que nos da unas moneditas y el bidon (hay que ver la mugre del bidon tambien) sin tapon y que se lo traigamos llenito. Bueno, igual sigue con cara de seco porque no se fia de que lo hagamos, y a la vuelta hasta hay buen rollito y todo. Keep smiling.
Asi que vuelta para atras, llena el bidon los 6 dolares pertinentes (la gasolina que nos hemos gastado de nuestro coche permanecera en los anales como nuestra modesta contribucion a la poblacion aborigen), y bronca que te crio del tipo del pub mas centrico de Australia, que eso de llevar un bidon de gasolina en el coche esta prohibido por ley y encima es un riesgo para nosotros. Quien coño nos habra mandado meternos en esto?
Venga, va, 20 km de vuelta y nos lo quitamos
Y esa bandera de florecitas?
Del scary poblado de Hermannsburg del medio, e igual hasta le pedimos una foto de esas que no se dejan hacer (no tenemos una sola instantanea, porque es sagrado y secreto y no se puede y...). De vuelta al dichoso centro de Australia, vemos un coche que viene en sentido contrario, para en el arcen, se baja una aborigen, nos hace senhales de que paremos,si, anda ya, estamos de ONG deambulate por el Outback, no te j....
Pero es que era la familia pin y pon (un respeto a la verdadera familia pinypon sorry), que, seguimos sin saber como es que al final tenian gasolina para seguir la ruta y ni nos esperan a que volvamos a donde habiamos quedado. Asi que frena en el arcen en mitad de la highway, y da media vuelta. Mira, nos da igual, llevate esto, el tipo nos coge el bidon por la ventana, suelta un thankyou de obligacion y se larga. Nevermind. Igual hemos tenido mala suerte y nos ha tocado justo el desagradecido de la especie, pero asi han sido las cosas y asi se las hemos contado... Y hasta aqui podemos leer, de lo vivido y sentido esta semanita, y nos despedimos, bien centraditos, por
Atardecer
En la roca es lo mas parecido que hay a la bandera del Atleti Victor una vez en la vida, aunque solo sea en el continente australiano.
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Ceferino
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Saludos
Como sabras aqui ha habido algunos cambios. Iñigo....Olivares. En fin lo mismo de siempre. Un abrazo fuerte.