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Published: July 21st 2013
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No sé donde debo empezar. De hecho, no puedo creer que ya hubiera pasado tres semanas de clases en Granada. Es una de las situaciones en que el tiempo vuela con rapidez, pero mientras lo pasa, es como está en un estado de limbo que dura por siempre. Aunque me agradezco la estructura diaria – corre con mis amigos, desayuno, 4 horas de clase, almuerzo – sería una mentira decir que no extrañe a los EEUU tremendamente. Déjame expandir en las detalles trivial de mi vida en Granada. Como he dicho, la comida es sagrada a mi. Por eso, a descubrir que el desayuno consistiría de huevos mojados, cada tipa de salchicha y carne imaginable, café terrible, y pan, montañas de pan, casi me morí. He aprendido como navegar el yogur de la temperatura ambiente con fruta. Pero gracias a Dios que el almuerzo es algo de que espero durante las clases. Nos sirven pescado prácticamente cada día. Nunca he comido tanto pulpo, mejillones, calamar, y camarones que he comido aquí. Y nos sirven verduras que están nadando (como cada otra cosa) en aceite y ensalada también; si no hubiera verduras, me moriría. Deseo comida japonesa diariamente, como mis amigos desean
comida mexicana. Para satisfacer sus anhelos, fuimos a la Cantina Mejicana que una amiga mía me recomendó; no era nada en comparación con la comida mexicana que puede encontrar en los EEUU (o, según ellos, en México) pero era un cambio necesario. Todavía estoy buscando un restaurante japonés que me parece creíble. Hay una heladería que visitamos con frecuencia que se llama Italianos – 1 euro por una barquilla y puedes escoger dos sabores.
Vale, a hablar de la ciudad, de que paulinamente estoy descubriendo
. La ciudad me parece compacta; puede caminar al centro en menos que 30 minutos y en el camino allí hay millones de restaurantes (de Shawarma!). La mejor comida que he encontrado aquí es Shawarma, que es comida Árabe similar a pita, pero mucho más mejor. Hay Bazars y tiendas de fruta desparramado por las calles. Me parece extraña la gran cantidad de tiendas y restaurantes chinos aquí; hay una población perceptible de ellos. Otra observación: los coches aquí son chiquitos y las reglas de los peatones no son tan estrictos. Cruza cuando no hay coches (o si hay, corre). Mucha gente tiene perros muy bien portados. Es increíble. Los esperan para cruzar, no necesitan
traíllas, y no ladran. Es raro a ver. Las calles son llena de gente por la noche (después de la siesta) pero entre las horas 2 a 6 todos echan una siesta con la llegada del calor. Las calles son desertados menos que las turistas, y cada tienda está cerrada. ¿Cómo sería productivos con este horario? El otro día, me perdí por las calles mientras estaba explorando, y me di cuenta que hay edificios hermosos, antiguos, e históricos en cada parte de la ciudad. También cada tienda tiene rebajas por la mes de julio, por eso, tengo que ir de compras otra vez para aprovecharme de estos precios tan bajos. Hay parques extremamente bellas que he disfrutado en mis caminos y mientras corro.
El 6 de julio, mis amigos y yo visitaron a Málaga, que es dos horas de aquí por autobús. Me encantaría quedarme allí por una semana; la playa era increíble – agua con olas pasivas en las que jugué por horas- y las calles eran decorados con tiendas y restaurantes y parques hermosas. Supuestamente, Málaga es un lugar donde la gente de España e Europa pasan las vacaciones del verano. Un nuevo deseo que tengo para
mi futuro – una casita en Málaga :]
La semana pasada tuve una aventura con mis amigos, quienes son de Granada, para encontrar un sitio que se llamaba el Mirador de San Nikolas. Después de viajar a través un laberinto de callejones, llegamos a este punto donde tuvimos una vista asombrosa del Alhambra por la noche. Hay lugares escondidos alrededor esta ciudad que son preciosos si los encuentre.
Además, pasamos la fin de semana pasada en Córdoba y Sevilla como un grupo. En Córdoba, vemos La Mezquita que en impresionante – la arquitectura y las niveles de historia que la compusieron me cautivaron. También la ciudad era preciosa con todas las tiendas de recuerdos y bares de tapas, a cuales estoy acostumbrado de ver. En Sevilla exploramos la ciudad en toda su belleza con la catedral central, el río hermoso, y su laberinto de calles (como cada ciudad aquí). Comimos comida japonesa y me casi moría con la felicidad. El domingo tuvimos un tour del Palacio de Alcázar que supuestamente es muy parecida al Alhambra que vamos a visitar el jueves. Me encantaba la arquitectura, especialmente los azulejos y mosaicos de la pared. Los diseños eran maravillosos y admiré la aplicación intensa del color en cada parte de los cuartos del Palacio. También, los jardines de Sevilla eran preciosos, especialmente los del Palacio, cuales tenían una influencia árabe en las fuentes pequeños incrustados en el suelo. Fue un maravillo a ver.
No puedo creer que tengo menos que dos semanas aquí. Siento como hay demasiado que tengo que explorar, pero no hay suficiente días para lograr todo que quiero. Estoy enamorado de Granada después de dos y media semanas de “vivir” aquí.
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