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Published: March 31st 2006
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Rompimiento del Glaciar
Se puede apreciar en la foto como cae un pedazo de hielo. Luego de comprar los viveres necesarios para acampar en la base del glaciar Perito Moreno, empezamos a desandar los 80 kilometros que nos separaban, todo el paisaje es desertico y en un punto aparecen los arboles y se forma el tipico paisaje andino, tanto terrorismo nos habia sembrado la flaca de direccion de turismo de que se iba a caer el glaciar que cuando nos detuvieron media hora porque estaban arreglando el camino y se podia circular en un solo sentido, casi terminamos por bajarnos y pegarle al loco para que nos deje pasar, por supuesto que al llegar el primer dia no haba mucha gente y entonces nos ubicamos en la playa de estacionamiento superior (luego paso a ser exclusiva de colectivos) y corrimos por las pasarelas hasta llegar a aproximadamente 300 metros del glaciar, calculo que hice tomando el tiempo que tardaba en llegar los estruendos de los pedazos de glaciar sobre el lago, luego de unas horas de vigilia se largo a llover y subimos a buscar las cosas a la camioneta y comer algun sandwichito, es increible como uno queda como hipnotizado esperando a ver caer el pedazo mas grande de hielo, aparecen muchos "expertos" en glaciar,
se hacen conjeturas, se expresan las emociones al sentir caer moles de hielo de mas de 40 metros de altura y 10 a 15 de ancho, verdaderos edificios se desploman sobre el Lago Argentino.
El Glaciar Perito Moreno es un manto de hielo, o casquete glaciar, cubre esta Área Protegida de 600.000 hectáreas. Entre los 356 glaciares, el Perito Moreno es el más imponente, con un frente de 5 Km. y una altura de más de 60 metros sobre el nivel del agua. Mundialmente conocido, justamente por sus procesos de ruptura el frente del glaciar, al llegar al margen costero, cierra el paso de las aguas del Brazo Rico y produce una especie de embalse donde el agua supera en desnivel unos 20 mts., originando la filtración que culmina con la esperada ruptura. Pero el espectáculo es continuo. Poder observar desde muy cerca el desprendimiento de bloques de hielo de diferentes tamaños, escuchar el estruendo que producen, y luego observarlos transformados en maravillosos témpanos flotantes. A mi primo lo agarraron los periodistas del Diario La Nacion y le hicieron una entrevista y salimos en tapa del sabado a la mañana en la foto se me puede ver a mi de
Nota del Diario
Pocos locos estabamos ahi haciendole el aguante campera celeste, negociando con los guardaparques para que nos dejen acampar porque el camping que figura en todas las guias no existe, y los guardaparques no dejaban acampar, como resultado dormimos en la camioneta y los catalanes se ganaron en los baños, para reconfortar la noche fria y lluviosa comimos un pucherazo con sopa infernal, se escuchaban ruidos infernales de la caida de los hielos, que aparentemente la lluvia ayuda al proceso porque cuando llovia se notaba que los pedazos empezaban a caer con mayor frecuencia.
Por la mañana seguia lloviendo y ya arribava mas gente al lugar, el hipnotismo del glaciar continuo hasta las cuatro de la tarde donde totalmente empapados y criogenados decidimos retirarnos a El Calafate por un buen chocolate caliente, un buen baño y ropa seca y limpia, la sorpresa fue que a mitad de camino habia sol con temperatura agradable por lo que decidimos acampar en un camping excelente "AMSA", atendido por un santiagueño muy piola. Por la noche habiamos invitado al neozolandes a cenar un arroz con calamares y cholgas que traimos de Chile, por supuesto lo regamos bien con un buen vino y a dormir para al otro dia temprano salir para el
Caida de Gigantes
Caian bloques de hielo del tamaño de edificios glaciar y verlo caer porque ya nos habia retrasado bastante en el viaje, es mas ya habiamos decidido sacrificar el viaje a Ushuaia y llegar a Punta Arenas como maximo. Ya a las 4 de la mañana la gente empezo a levantarse para salir hacia el glaciar asi que a eso de las 8 arrancamos nosotros y la sorpresa fue que al llegar debimos dejar la camioneta a unos cuatro kilometros, por la cantidad de autos que habian llegado y estamos hablando de las 10 de la mañana, seguia lloviendo y frio en el glaciar, y muy buena la labor de los guardaparques que iban y venian con camionetas, jeeps y traffics para que no tuvieramos que caminar tanto, igualmente habiamos pagado $10 para entrar cada una de las veces. Por la tarde al ver que el glaciar iba a tardar mucho mas en caer y con miedo a que caiga de noche (como luego sucedio) decidimos que ya estabamos empachados de ver caer montañas de hielo y retornamos a El Calafate a por una cervezita en un LibroBar muy bueno donde pudimos disfrutar de muchos libros de fotografias y especialmente de "Patagonia Tierra de Gigantes", cuyo autor Daniel Rivademar,
El Gran Boquete
Al tercer dia ya se caia pero tardo dos dias mas estuvo conversando con nosotros el primer dia en el Glaciar y contando su historia, una persona, reservada y humilde en sus conocimientos, lo que da la pauta de ser una excelente persona, pueden visitar su sitio http://www.patagonia-australis.com.ar.
Antes de dormir me comi un yogurt que estaria en mal estado porque a la mañana siguiente sali "cagando aceite" con mi primo para Puerto Natales en Chile, pero al llegar a la frontera nos encontramos que estaba muy nublado y tormentoso por lo que las Torres del Paine no las ibamos a poder ver asi que seguimos a Punta Arenas para volver en un par de dias, del viaje mucho no recuerdo porque con un poco de fiebre con la descompostura y las idas al "baño" tan rapidas no pude disfrutar del viaje, pero si a la vuelta!
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