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Published: August 24th 2008
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Varanasi, la ciudad de los gaths a orillas del Ganges, nos recibe despues de dias de intensas lluvias, con los niveles de agua al maximo. Las famosas escalinatas donde la gente viene a purificarse, a rezar, banyarse y otros usos diversos, estan inundadas y su espacio se reduce a unos cuantos escalones desde la calle. Este inconveniente dificulta bastante el transito por la ciudad, lo que habitualmente debe ser un paseo por los gaths mas o menos en linea recta, se convierte en un laberinto de callejuelas estrechas por donde no cabe ningun medio de transporte y escasamente pueden caminar las vacas. Es dificil orientarse, mas aun cuando se hace de noche y solo quedan vacas, perros y algun guiri suelto, pero despues de dos dias hemos conseguido aprendernos el camino al hostel.
Veniamos un poco sugestionadas por todo lo que hemos oido hablar de esta ciudad y para vuestra tranquilidad, tenemos que decir que no es para tanto. La gente suele buscar el lado morboso de las cosas y la imaginacion del oyente hace el resto, pero aqui hay que mirar con otros ojos, abrir la mente y entender su cultura. Todo lo que nos ha pasado por delante estos
dias nos ha impactado, pero no nos ha traumatizado. Es mas, nos debemos estar volviendo un poco insensibles porque despues de dar el paseo en barca por el Ganges a las 6 de la manyana y ver los crematorios, nos hemos ido a desayunar a una "German Bakery"... que cierto es el dicho de "el muerto al hoyo y el vivo al bollo".
Dejando el tema morboso a parte, es muy curiosa la devocion por el Ganges y los rituales que hacen (banyarse, lavar la ropa, limpiar los utensilios de cocina, asearse, beber...), todo en pocos metros y sin ningun pudor. Nosotras mirabamos asqueadas como beben del agua marron donde minutos antes han tirado una bolsa de basura o ha pasado una culebra, y esta manyana nos ha tocado meternos en el rio hasta la rodilla para llegar hasta la barca. Un senyor que se banyaba tranquilamente a nuestro lado se reia de nuestros gritos de asco al pisar terreno pantanoso y nos decia "mama Ganga", como diciendo, "tranquilas, es el Ganges...". Tambien debia alucinar el del ricksaw que nos ha llevado a uno de los hoteles de lujo, con bikini y pareo bajo el brazo, para darnos un chapuzon
el la piscina y sacarnos tanto calor acumulado. Nuestro gozo en un pozo, 500 Rupias cada una (unos 10 Euros) por chapotear en una charca verde, ni locas! Asi que hemos vuelto al hostel al sistema de ducha fria con el cubo.
Esta ciudad es sucia, caotica y algo tenebrosa, pero tiene un encanto especial y es unica.
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Irene - Xeli
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Hola princeses maharanis. Cada dia se us veu més sueltes i és un gustàs seguir la vostra petja per l'India. Heu complert amb escreix davant del Taj Mahal, fantàstic el subidón!, i des d'aquí us puc dir que no em sorprèn gaire que us reconeguin...vosaltres no necessiteu plomes al cap per a fer-vos notar! Eli, guapa, m'apunto el Xalo, xalo, per a la pròxima pel.li, sempre va be tenir recursos per a esperonar els atrezzistes. Una abraçada