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Published: April 5th 2010
Y por fin Costa Rica!!! la última etapa de este viaje y también la mas esperada porque me voy a encontrar con Rafa y Victor o lo que es lo mismo , despues de mucho tiempo me voy a reencontrar con la amistad , las risas y el mejor humor... como además esta es una oportunidad unica para disfrutarla todos , deseo compartir la buena energia y buen humor de los amigos ,vamos a exprimirlo al máximo asi que esta vez va a ser Victor el encargado de relatarnos con su peculiar punto de vista y punzante sentido del humor esta parte del viaje...asi que preparense a disfrutarlo, les dejo con Vitocho y su detallado Diario del Viaje a Ticolandia...La aventura comienza aquí.
Como voy a estar cansado de repetir las batallitas del viaje a unos y otros he decidido dároslo por escrito. Eso sí, esto va a ser como escribir el Quijote, y más de uno se va a saltar los renglones de 10 en 10, no importa, también advertirles que sirve de guía de viaje, están los precios de comidas y traslados, la mayoría en colones y dólares, la traducción a euros la hacen ustedes que
ya son mayorcitos y no les hace falta que les mastiquen la comida, así que ojo y calculadora en mano. No es tampoco el recorrido perfecto si uno va a Costa Rica, pero es el que hicimos. Sí, faltaron lugares, aunque se añadieron otros sobre la marcha. Muchas de las anécdotas ni les van ni les vienen, pueden aburrirse, es normal, e incluso se permiten críticas (las positivas), las destructivas se guardarán en el armario de las venganzas donde esperarán el momento preciso para salir. Preparados ????? Pues tomen asiento, acerquen el cenicero, cojan el tabaco, y si pueden sírvanse un cubata, nos vamos a Costa Rica...
DIA 1. LA PARTIDA
Comienza el viaje, de nuevo volver a ver a Paco, unas de las razones de haber cruzado el océano, bueno, y ya de paso ver como es eso de Costa Rica. Primera etapa Gran Canaria- Madrid, pero previamente como nos quedaban unas cuatro horas antes de la salida del vuelo nos reunimos con Acaymo y Tibi para despedirnos delante de par di cubatas en un bar de Melenara que no está nada mal, para más señas el Tres Anclas. La despedida se nos fue un poco
de las manos y con el el vuelo en hora y ocho cubatas emprendimos trayecto hacia Madrid, por suerte mis alteradas facultades efecto del alcohol me condujeron a un plácido sueño que mitigó la incomodidad de esta parte del viaje.
Ya en Madrid optamos por perdernos en el metro, la escala era de 6 horas y queríamos desayunar algo, nos recibió un día gris y lluvioso, las calles vacías, era domingo y nos costó encontrar un sitio abierto; después de cumplir con nuestros estómagos volvimos al aeropuerto. Por el camino conocimos a Amy. Ver a una chica con tacones arrastrar dos pesados maletones despertó nuestro lado caballeroso,nos ofrecimos a echarle una mano con su equipaje y a pesar de la pinta de delincuente habitual de Rafa no puso mala cara, supongo que mi aspecto cuidado, juvenil y serio, acompañado de mi elegante vestir ayudó a que confiara en nosotros. La chica era hija de ecuatorianos, pero había nacido y vivía en New York; estaba de vacaciones para ver a su hermana. Nuestra buena acción nos consiguió su correo electrónico y una invitación a su país. Por cierto, que la niña según su tarjeta era directora de merchandising de Tommy
Hilfigger. Pues ya podía haber cogido un taxi.
Hora de embarcar, excursión por la T4, allí estaba el 340 de Iberia y once horitas y media de vuelo por delante esperándonos; menos mal que Tomi el hermano de Rafa trabaja en Iberia y nos consiguió un sitio decente para así evitar la amputación de las piernas por la inmovilidad.
LA LLEGADA
... Y por fin aterrizamos, ya estábamos en Costa Rica, pasamos unos controles rutinarios de pasaporte y las mochilas por el scanner. Aparte de ropa ligera (camisetas y bermudas) sólo llevamos unos chorizos de Teror y un cacho queso del país que pasaron desapercibidos.
Y allí estaba Paco, vestido como un auténtico explorador, con la ropa y piel curtidos tras mucho tiempo en la selva, nos abrazamos y tras esquivar a la tropa de taxistas y buscavidas nos dirigimos a la parada de guaguas (450 colones c/u) , empezaba a estar claro que Paco nos iba a hacer conocer el país a su estilo.
Nuestra primera parada iba a ser el pueblo de Alajuela, a 15 minutos del aeropuerto, y de esta forma evitábamos San José, la capital, pues según nos habíamos informado pecaba
de ser un pelín conflictiva y además se encontraba a una 1/2 hora del aeropuerto.
Alajuela es un pueblo pequeño, e iba a ser el primer contacto con la cultura Tica, que es como se autodenomina esta gente. Tiene sus supermercados, bancos, y los servicios necesarios para ser el mejor punto de partida.
A eso de las 18:00hrs. arribamos a nuestro primer alojamiento el Hostal Trotamundos, básico pero suficiente para nuestras necesidades; Paco había reservado una habitación con dos literas, ventilador e incluso televisión. Salía 13 dólares por cabeza con desayuno incluído.
Ya situados nos fuimos a por nuestra primera cervecita, de la marca imperial, la de la tierra; el bar Taraqueño a 5 minutos del hotel sería el elegido. El local me sorprendió, decorado con fotos de los rollings, pink floyd, led zeppelin y ... Camilo Sesto, todo en madera y regentado por un tico seguidor del Madrid.
Hasta la música que sonaba era buena, yo venía con la idea de que la salsa y sus derivados iban a ser la tónica normal, pero no, sonó incluso Ten Years After. La primera cerveza dió paso al primer cubata, y luego una pizza para ir tirando,
terminamos acoplándonos con los nativos del local y echando unas risas, pero había que madrugar, y a las 22:00hrs ya estábamos en el campamento base ( 8 birras+3 rones dobles con cola + 1 pizza=32000 colones ).
DIA 2
Tempranito en pié, nos echamos el desayuno, austero pero nutritivo: fruta, galletas y café. Me está empezando a gustar el café, muy rico. Tras ello fuimos al banco a cambiar perras:
( 1$= 550colones; 1 €= 755 colones, tomen nota que no lo vuelvo a repetir).
De ahí decidimos que el siguiente paso sería hacia La Fortuna, un pueblo enclavado en la falda del volcán Arenal. En principio la idea era alquilar un coche, los encargados del hostal hicieron amablemente las gestiones, la chica, Wendy, se preocupó de llamar a un puñado de agencias sin un mal gesto, y siempre con la sonrisa en la boca, un encanto. Pero no hubo fruto, los precios eran desorbitados, cerca de los 100$ diarios. Mejor haberlo reservado desde España, así que: a por la guagua
Como nos habíamos quedado con ganas después de las once horitas del avión nos hicimos un extra de 5 horas más hacia del pueblo de
la Fortuna, llamado así por la suerte que tuvieron de que la erupción del volcán no se los llevara por delante. Creo recordar que fueron unos 2500 colones por cabeza.
Nuestro guía natural, Paco, ya se había encargado de reservar algo en Gringo's Pete, un albergue para mochileros al precio estrella de 4$ la noche, el sitio más barato de Costa Rica. Allí nos esperaba Pete, un yankie entrado en años con un carácter digamos extraño. Huelga decir que seguíamos a piés juntillas la Lonely Planet, la Biblia del viajero.
Marta, una joven nacida en Nicaragua nos enumeró las normas a seguir y estuvimos de acuerdo. La habitación constaba de 4 literas a compartir con otra gente ( entre ellos par de piesnegros yankies) y una taquilla para guardar las mochilas. El sitio tenía varias habitaciones, una cocina con salón comunitario y un jardin con una barbacoa donde vemos nuestro primeros colibríes libar las flores, eso sí, a las 22:30hrs a dormir o a la calle a buscar bares.
Aún quedaba día por delante, y el hambre apretaba, así que fuimos a por nuestro primer casado, el plato típico del país consistente en arroz, frijoles, plátano frito
y carne; de pollo, res, o mechada, de 2500 a 3000 colones c/u. Y luego a la licorería a por par de birras (900 colones c/u) y porqué no, una botellita de ron (3500 colones) de 300 ml, hielo y refresco. Curiosamente para lo que yo pensaba el hostal permitía el consumo de alcohol.
Era temprano, fuimos al jardín y allí estaba Marta, la encargada nicaragüense currándose un asadero con el dueño, la vecina (vicky) y otra empleada (Elisabeth). Igual fue por compromiso, pero nos invitaron y claro, uno no sabe decir que no. Entre la nica (así llaman a los nicaragüenses) y yo fundimos la botella. Marta era una tipa dura, su función la desarrollaba con firmeza y no esbozaba sonrisas, pero eso fue hasta que se echó el primer ron, luego se ablandó y participó de las bromas. Me llevé una grata impresión de ella, así como de Elisabeth, que era un poco cáncamo, pero buena piba en el fondo.
Tuvieron paciencia con nosotros y nos aconsejaron y respondieron a todas nuestras preguntas con gran amabilidad, esa parece que va a ser la tónica habitual del país.
...Y en eso aparecen 3 huéspedes más buscando
alojamiento, españoles, para más señas llegados del País Vasco; son Jose, Darío y uno que dice llamarse Jackson, la verdad es que no es un nombre muy étnico, pero es que el tipo se llama en realidad Jasón, pero se ve que funciona mejor para ligar el rollito exótico, además nada mas conocerlo nos dimos cuenta que era para echarle de comer aparte. Estuvimos vacilando un rato con ellos y a la camita que ya era hora y había que madrugar.
DIA 3
Toca la catarata de la Fortuna, Marta nos arregla un taxi por 3000 colones que viene a buscarnos al hostal, son 7 kilómetros pero hemos quedado a las 14:00hrs para hacer un visita en canoa alrededor del volcán Arenal y no podemos perder mucho tiempo pateando, Marvin es el taxista y en 15 minutos, 10 dólares por la entrada y 500 escalones estamos nadando bajo una cascada de unos 40 metros con un caudal impresionante tras las últimas lluvias. Allí descansamos entre baño y baño en unas aguas limpias y frías. Un par de horas allí y de nuevo Marvin nos recoge y nos lleva a una soda, un bar de carretera de precios económicos
para engullir un casado y 2 hamburguesas con unos zumos naturales (3000 colones).
Ya en Gringo's Pete nos ponemos en manos de la gente que nos lleva al tour del kayak alrededor del volcán, Dani es nuestro guía, un tipo menudo y dicharachero. Empieza la odisea, lo que prometía ser un paseo bucólico se convierte por obra y gracia de los elementos en una tortura, la poca profundidad nos obliga a estar continuamente arastrando el kayak, mis cholas resbalan y se clavan en mis dedos (mal día para olvidar los escarpines en el hostal), pero finalmente llegamos a una zona donde el nivel del agua ya era aceptable para una navegación óptima, sobre un pueblo que fue inundado para hacer una presa, entonces sí, el volcán Arenal en plena erupción, flipante, una columna de humo se elevaba hacia el cielo, y ya de noche el naranja de la lava se dibujaba en la falda de la montaña, una estampa diferente. Centroamérica está jalonada de volcanes activos, es una zona caliente del mapa y los lugareños están acostumbrados a vivir a su vera, no se puede despreciar el dinero que se asocia a su cercanía.
La oscuridad nos invita a
volver, y es cuando los mosquitos hacen acto de presencia, intentando espantarlos le doy a Rafa en la cabeza con el remo, sube la tensión, encallamos y no queda otro remedio que arrastrar la embarcación sobre 10cms de agua, mis dedos se van a romper, entonces Rafa trinca nuestro kayak, mete la marcha más cañera y sale por patas hacia la lejana luz de la furgoneta. Mientras yo, descalzo, hacía equilibrios enter rocas y arena junto a Paco que cargaba a hombros su canoa individual. No sé expresar la emoción que sentí cuando alcanzamos la buseta, que es como llaman aquí a las furgonetas.
Dentro del paquete contratado (30$ por persona) se incluían unas aguas termales en Termas Baldí, una serie de 15 piscinas de ambiente pijo de diferentes temperaturas donde nos relajamos y pude echarme un cubata en un bar instalado en el centro de una de ellas, incluso nos lanzamos por unos toboganes al estilo aquapark, nos divertimos como niños, y como colofón buffet, donde Rafa no dió un segundo de tregua a una fuente de chocolate caliente en la que bañó fresas y nubes de las que compras en tiendas de golosinas.
No había ganas
de salir, Paco se había comprometido con Valeria, una de la currantes del hostal, para echarnos una birra, y se había puesto tan pesada que no pudo decirle que no. Ya dispuestos a salir nos encontramos con los vascos, que a partir de ese momento iban a ser bautizados como el Comando Jackson, y los enrolamos en la travesía, era curioso, pero había un cierto paralelismo entre ellos y nosotros. Paco tenía su homólogo en Jose, el más trascendental, Rafa con Darío, el cáuto y observador, y digamos que yo, era algo así como Jackson, aunque salvando las distancias. Por lo menos el tío sabía de música y pasamos los seis un rato ameno, es decir, 6 cubatas. A la que no vimos fue a Valeria (que pena, uff), que al día siguiente con gesto de enfado nos recriminó que la hubiésemos dejado colgada. Al final pudimos convencerla de que la habíamos estado buscando.
Tocaba abandonar la Fortuna, próxima parada Monteverde...
"To be continnued" ...o continuará como dicen en las novelas americanas...Si quieren saber lo que pasó en Monteverde habrá que esperar unos dias mientras animamos a Victor a terminar de redactarlo , asi que tengamos paciencia...
Mientras les tengo que pedir a todos un favor. En Guatemala me desapareció "misteriosamente" el telefono móvil y con él, la agenda de telefonos de todos ustedes, asi que les agradeceria me enviasen desde el blog un mensajito privado con su teléfono para poder seguir en contacto. Gracias
Abrazos a tod@s
Paco
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Alo
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Para paco
Señor, te admiro de veras, espero que estés bien, y que se lo estén pasando a lo grande. Un saludo y a cuidarse