Lo mejor de Estambul son los heladeros!

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Si hay algo que los chicos nunca van a olvidar de Estambul, definitivamente, son los heladeros. Están por todos lados y son uno mas personaje que el otro.

Los helados son malísimos. Hay varios gustos, o mejor dicho colores, porque el chocolate sabe igual que la frutilla o la crema.

Cuando pedís un helado, los tipos empiezan a hacer todo tipo de trampas y bromas. Como por ejemplo darles un helado vacío, hacerles agarrar solo una servilleta o cuando le dan el helado hacer que se cae al piso o pintarle la nariz a los chicos.

Después de cada cena, los enanos pedían “helado de trampa” y disfrutaban con los chistes de los heladeros.

Si van a Estambul, no dejen de comer un heladito!

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