Ha Long Bay

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Hola a todos! Recien llegados de Halong Bay…la verdad impactante, es un lugar magnifico. Nos pasaron a buscar al horario pactado en un minibús con el nombre del crucero…la primera impresión fue buena. El guía era un enano vietnamita, que nos recordaba al chinito de “Hang Over”, vestido muy canchero: sombrero de paja, anteojos espejados, chomba ajustada con el cuello levantado. Muy gracioso!
Éramos unas 20 personas, mitad asiáticos mitad carapálidas (australianos, españoles, alemanes y un francés). Si bien todos charlamos entre todos, hubo mayor afinidad con los no amarillos.
Luego de 3 hs de viaje en minibús, bastante apretaditos por cierto, llegamos a la ciudad de Halong, al puerto precisamente. Todos con gran expectativa para ver cómo era el barco, sobre todo nosotros que luego de un largo regateo habíamos conseguido un muy buen precio, con lo cual no sabíamos con qué nos podíamos encontrar. Un barco menor nos vino a llevar a nuestro crucero, después de una media horita bajo el sol radiante. Ahí, flotando entre los miles de barcos de excursión, estaba el “Luxury Aurora Cruise”…nuestro nuevo hogar por 2 dias. Si bien no era exactamente lo que nos habían vendido, supero nuestras expectativas en cuanto a comodidad, comida y amabilidad de la tripulación. Nuestro cuarto, en la planta baja y pegadito a los motores, nos recordó a la tercera clase del Titanic, ya que en los pisos superiores subía la calidad….y el precio también. En fin, la relación calidad/precio estuvo más que bien!
Unos 40 min después de zarpar, llegamos a las primeras islas de la Bahia. Ahí, en medio de todo ese paisaje imponente, hicimos 1 hora de kayak por los mercados flotantes y las islas de la zona. Al volver al barco nos recibieron con unas frutas y vino tinto y continuamos nuestro paseo entre las islas hasta llegar al lugar donde pasaríamos la noche. Alli pudimos darnos un chapuzón en el agua, que estaba divina. Incluso nos había parecido muy caliente!! El lugar donde frenamos era realmente impactante y además estábamos solos!!
Después de nadar un rato, nos duchamos en nuestro camarote y fuimos a cenar…había papas fritas!! Entre cerveza y cerveza, arranco el karaoke. Al principio, solo se animaron los orientales, con músicas súper melosas en vietnamita. Parece que los orientales se toman el karaoke bien en serio, nada de desentonar y hacer papelones como nosotros estamos acostumbrados. Eso intimido un poco al grupo de los carapálidas, que de a poquito fuimos llegando, mayormente para “hacer palmas”. Por suerte alrededor de las 11 de la noche, los vietnamitas que quedaron cantando solos, decidieron apagar la música y dejar dormir al resto…a las 7 am era el desayuno!
Tipo 5.30 am nos sonó el despertador para fotografiar el amanecer. Axel corrió la cortina, nos miramos, y sin dudarlo mucho le dimos derecho hasta las 7 am. Desayunamos, y más tarde nos llevaron a unas cuevas que hay en una de las islas (está en la foto). Las cuevas eran tan grandes que nos llevó como 20 minutos recorrerlas. Durante el recorrido, el chinito de Hang Over continuamente nos mostraba figuras formadas en la misma piedra, que con extrema imaginación conseguíamos ver.
Al regresar al barco, preparamos las valijas e iniciamos el retorno al puerto. Al rato sirvieron el almuerzo mientras navegábamos. Las 3 horitas de minibús de regreso a Hanoi fueron un tanto más sufridas, quizás por saber que esta noche nos esperan 15 hs de tren! Como reflexión final por si alguien hace el paseo de Halong Bay es que “2 días, 1 noche” es suficiente, pero sin dudarlo nos hubiéramos quedado un día más para relajarnos en el barco y hacer el “3 días, 2 noches”.

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