Chiang Mai

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Seguimos vivos, chavalotes!!!

Bueno, bueno... al fin he podido conectarme a internet. Hemos estado un poco desconectados estos días por el monte tailandés y hasta que hemos tenido un rato de libertad ha costado... pero ahí vamos. Os cuento màs cosillas del viaje.

La noche de Shukhotai acabó peor de lo que empezó. Y no empecéis a imaginaros ciertas cosas, que no van por ahí los tiros, que os conozco!! Resulta que después de cenar en un mini-restaurante de una calle un arroz con unas birras, y de meternos unos pinchos de no sabemos muy bien qué carne de un carricoche de estos de la calle, nos fuimos a echar la última a un garito con mesas y música en directo.

El tema es que al ir a echar una foto al garito en cuestión con mi cámara, la pantalla no se encendía, con lo cual no veía cómo ni a quién disparar. Resultado, cámara estropeada y fin de "Luis photographer" para el resto del viaje. A tirar con la de Dani el resto del viaje, no problem! Pero a mí me jodió muchísimo, porque no es una réflex, pero es de gama top de las compactas. Shit!!!!!!

El día siguiente fue de tránsito. Pillamos un bus de cinco horas y media que nos dejó en Chiang Mai a las 3 de la tarde.

Nos metimos en un cuchitril-restaurante a comer, y, definitivamente, nos cercioramos que la "Thai food" no es lo nuestro. Lo siento, a mí no me va! Ni me va el chili, ni me va el spicy, ni el curry... Que sí, que todo el mundo dice que somos muy rarunos, que la comida es excelente... mentira cochina!!! El cerdo del plato de la comida del medio dìa llevaba ocho meses y medio muerto, y sabía a cuerno rancio de flipar!!! Y por la noche, probamos suerte con la "seafood" y nanai! Nos pusieron una especie de sepia fina, con una textura a medusa que me entraron arcadas. Nefasto!! Y mira que hablamos con una chica navarra que nos aconsejo y tal... cuando es que no, es que no, y punto!!! Mediterranean food, please!!!!!

Como vimos que lo sólido no nos molaba mucho, probamos con el líquido elemento en un bar, por la noche. Era una especie de karaoke venido a menos, con un tipo a lo Michael Douglas desafinando como el gallo Koki! Menudo matarile de tío! jajajaja Y ya íbamos a dar por zanjada la noche hasta que observamos que por delante de nuestro bar no hacían más que pasar tuk-tuks cargados de guiris en la misma dirección. Así que allá que fuimos... Como buenos sabuesos nocturnos, barruntábamos fiesta... Lo que no sabíamos era que toda la fiesta de Chiang Mai se concentraba en el mismo sitio! Una quincena de garitos alrededor de una terraza con mesas y bancos, y bien de música, y bien de bailes, y bien de música en directo, y bien de birras!!!! Yeahh!!!

Al asomar el morro en este sitio (yellow bar) nos persignamos, dimos cinco pasos a lo Chiquito de la Calzada y nos encomendamos a la reina farándula!!! La mañana siguiente lo íbamos a pagar caro!!

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Y la mañana siguiente llegó, claro. Con una resaca elegante y muy pocas horas de sueño.

A las 9:15 teníamos que estar en la puerta de una agencia para que nos recogieran en un jeep y empezar nuestros 2 días de trekking por los montes de la zona.

Ya sabéis cómo funciona toda esta historia. Contratas la excursión en una agencia de la ciudad al mejor precio que puedas rascar, te juntan con otros gumiales como tú, os meten en una furgona y os pegáis dos días juntos rulando y haciendo lo que entre en la excursión.

A saber... La fauna: 3 tíos españoles, 2 tías belgas, un italiano, una portuguesa, un japo, un francés y un yanki. La ONU.

El programa: trekking, cascadas, baño, elefantes, rafting, pueblo autóctono y pa´casa.

Resumen-resultado de la jugada: áltamente recomendable!!

Por partes... A nosotros nos vino a recoger la furgo, y ya había un tío montado. Un español. Maldije mi mala suerte, evidentemente!! No sé, siempre me pasa que no me apetece juntarme mucho con españoles cuando voy de viaje. Es algo absurdo y tonto a la vez, lo sé, pero me pasa. Y sobre todo, no lo entiendo porque la mayoría de españoles con los que me he topado en situaciones así, en distintos viajes han sido majísimos y buena gente. Me acuerdo ahora de compañeros de tren, de excursiones, de hostels... no digo nombres por no dejarme a alguno, pero todos ellos buenísima gente!! Pues bien, éste tampoco se ha quedado manco. Majo, majo donde los haya. Buen tipo Iu,catalán, grande!!!!!

Los tres "spaniards" fuimos replegando al resto de la expedición y tras un alto en un mercadillo en el que los maños aprovechamos para "aliviar" nuestros bodies (vaya atasco se formó... al ver que tras unos cuantos minutos mi compa no salía del wc me fui pitando de allí para que no me identificaran con la fechoría... jajajaja), salimos rumbo a empezar el planning.

Lo primero, la rutilla con los elefantes. No os miento si os digo que es una auténtica turistada, pero también os digo que mola. Yo me esperaba un paseo más largo, pero... oye, no todos los días tienes la posibilidad de darte un paseo en elefante a orillas del Ebro por el Pº Echegaray!!

Comimos por el camino un arroz riquísimo que nos habían preparado los guias y llegamos a una cascada espectacular. Yo en cuanto veo agua a la vista no puedo evitar la tentación, así que allí que me metí a las primeras de cambio, y así todo el mundo salvo Atsu, el japonés que no piso el río y nos contemplaba con su rostro sereno, lleno de paz, desde la orilla.

Yo vi que Dani empezó a echar fotos a la cascada desde dentro del río, y después me desentendí. Después, uno de los guías empezó a echarnos fotos como si no costara. Y bien de agua a la cámara... y yo decía, pero ¿este tío cómo es que tiene una cámara digital ahí echando fotos? pero no le di más importancia.

Al cabo de una hora, la pantalla de la cámara de Dani dejó de funcionar. La cámara del guía era la de Dani, que murió por ahogamiento tras una hora de fatídicas bocanadas de agua de río tailandés.

Resultado: los maños la han cagado pero bien. El resto del viaje sin cámara de fotos, por listos!!!!!

Tras otro rato de trekking, llegamos al poblado donde nos preparon la cena y dormimos. No sin antes tener una velada espectacular, con cánticos incluidos, cervezas, juegos de magia que nos hacía la gente local y demás... Es difícil describir con palabras todas estas vivencias. Es genial. Estás perdido en medio del mundo, con gente a la que acabas de conocer, pasándotelo en grande... pues eso...

Al día siguiente, tras una noche toledana debido a los magníficos colchones consistentes en tablas de palé cubiertas por una alfombra, nos encaminamos hacia la siguiente cascada. Más de lo mismo. Bien de baños y bien de risas.

El rafting en balsa de bambú lo hicimos únicamente los que teníamos contratado el trekking de 2 días. El americano y las belgas siguieron con el trekking. Y el resto montamos dos barcas. En una íbamos los "spaniards" y en otra el resto de la expedición. España contra el resto del mundo... imaginaos quién gano... a perrería no nos gana nadie. Nosotros no hacíamos más que pincharle al barquero para que remara fuerte, y el de la otra barca nos intentaba volcar... en fin... como críos.

La vuelta a Chiang Mai en furgo se hizo un poco pesada. Demasiado calor y demasiado cansancio. Una buena ducha y una buena siesta nos hizo restablecer un poco. Y de ahí, a los brazos de la diosa noche sabadera, con Iu y Atsu. 3 españoles y un japonés. Fuimos a una disco que nos había recomendado Iu... no puedo describir lo que había allí dentro. Os diré que es como las Casas de la Música en Cuba, pero a lo bestia. Intimidador.... Tras una cerveza, los mañós nos llevamos de allí al japo para que no mancillase su inmaculada reputación y... nosotros nos fuimos a dormir porque íbamos reventados. Vino bien para reponer un poco de fuerzas.

Otro día os cuento más y mejor.

Salud!!!!

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