Uno de los ultimos regalos que nos dio la vida en el 2007, fue la posibilidad de invitar a conocer nuestro nuevo mundo a nuestras personas mas queridas. Venir a Libia no era tarea sencilla, había que disponer de muchos días, tener el pasaporte, correr atras de las visas y poder tomar la decisión de venir en 10 minutos. Al final, la comisión del viaje fue formada por la abuela Elisa, la abuela Pochi y el tío Gasti. Paseamos por Trípoli, festejamos juntos el año nuevo, fuimos a las ruinas, al desierto, festejamos el cumple de la abuela, fuimos de compras y mil cosas mas. Queremos decirles muchas gracias por haber venido, por mimarnos tantos, por cuidarnos, por cocinarnos cosas tan ricas, por hacernos compañía, por despertarse las noches que nos desvelábamos, por jugar con nostros
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